Si tus hijos invierten mucho de su tiempo en videojuegos durante las vacaciones, esto te va a intere

Con la llegada de las vacaciones, es muy probable que ya te hayas puesto a pensar en todo el tiempo libre que tendrán tus hijos. Sin embargo, también es posible que ellos estén pensando en aprovechar ese tiempo para utilizar aparatos electrónicos, específicamente videojuegos. Pero, ¿te has puesto a pensar en los efectos positivos y negativos que tienen en su desarrollo físico y mental?
Hay que admitirlo, no todo es malo en cuanto a los videojuegos. Por el contrario, muchos estudios han comprobado que implican un gran entrenamiento cognitivo y una mejora de habilidades mentales como la creatividad, la toma de decisiones y la percepción. Otros estudios han demostrado que los juegos electrónicos también ayudan a mejorar habilidades relacionadas con la memoria y el pensamiento rápido, así como la coordinación mano-ojo. También se ha constatado que aquellos que son más hábiles en estos juegos son capaces de tomar decisiones y actuar de acuerdo a ellas hasta cuatro veces más rápido que aquellos que no.
A pesar de los aspectos positivos que estos contenidos puedan tener, es importante que como padre prestes atención a los que tus hijos consumen y juegan. Busca sacar el mayor provecho de este tipo de entretenimiento con las siguientes recomendaciones:
Elige juegos educativos que faciliten funciones cognitivas para su desarrollo.
Elige títulos que favorezcan más de un jugador y no la individualidad.
Establece tiempos (no más de 2 horas, 3 días a la semana) y lugares (áreas comunes) en los que tus hijos puedan jugar, de tal manera que promuevas el autocontrol y prevengas la dependencia a los videojuegos para poder divertirse.
Considera que todos los videojuegos tienen una clasificación norteamericana, infórmate sobre ella y revísala antes de comprarlo; aunque este muy de moda, recuerda que los juegos violentos, sangrientos y de terror pueden dañar su desarrollo emocional y social de tu hijo.