top of page

HAPPY SLAPPING: otra forma de ciberbullying



El término happy slapping se traduce como “bofetada feliz” y es la grabación de agresiones verbales, sexuales o físicas entre compañeros de escuela con el propósito de compartirlas en redes sociales. Comúnmente ocurre entre adolescentes de 14 años.


Se le llama “bofetada feliz” porque en un inicio se trataba de bromas inocentes que fueron evolucionando hasta convertirse en agresiones.


¿Por qué alguien haría happy slapping?


Aunque los jóvenes sepan que agredir a alguien es negativo, los likes y comentarios en redes sociales pueden llamar demasiado su atención y confundirlos. Obtener aprobación y sentirse en poder pueden ser motivaciones para comportarse de maneras que usualmente no lo harían.


De acuerdo con la organización para los derechos de los niños Save The Children, en el 61% de los casos los agresores son amigos o compañeros de la víctima.


¿Cómo hablar con mi hijo sobre happy slapping?


Acércate tu hijo, coméntale lo que sabes y dale la confianza para que te cuente si ha vivido o participado en un caso similar. Estos son algunos aspectos que es importante resaltar:


Doble agresión: Ocurre entre compañeros de clase, por lo que es considerado acoso escolar, pero al ser grabado y compartido en redes sociales se convierte en ciberbullying.


Daños emocionales: La víctima revive la agresión al tener que volverla a vivir en redes sociales y ver comentarios y burlas de otros compañeros.


Compartir, comentar o dar likes es participar: Quién agrede, lo interpreta como una señal de apoyo y puede motivarlo a seguir haciéndolo. Es mejor denunciarlo de manera anónima en redes sociales y ante las autoridades de la escuela.


Quién graba también es culpable:Porque conocía el plan, lo presenció y no intervino para detenerlo. Si la víctima decide presentar cargos legales o ante las autoridades de la escuela, esta persona también sufrirá consecuencias.


Los likes “no importan”: Dale la seguridad a tus hijos que no debe condicionar lo que sube a redes sociales por la interacción que espera de sus amigos, lo que suba debe ser con el objetivo de compartir algo con los demás, no con el objetivo de tener likes y seguidores.


Ponte en su lugar: Sensibiliza a tu hijo para que piense en lo que el sentiría si estuviera en el lugar de la persona a la que le estan jugando una broma, tanto para grabar y subir como para compartir.


Si tu hijo está triste o irritable, tiene problemas para dormir, deja de echarle ganas a sus tareas y se angustia mucho por ir a clases; platica con él e intenta averiguar si ha sufrido de acoso escolar. Tal vez no quiera hablar del tema por miedo a delatar a sus compañeros o amigos, para motivarlo a contarte intenta hablar con tranquilidad.


Si sospechas que es él quien realiza el happy slapping, pregunta y escúchalo sin agredirlo. Intenta averiguar las causas y motívalo a disculparse. En este tipo de situaciones, ya sea víctima o acosador, es recomendable pedir ayuda de un especialista.

bottom of page